Mis primeras lanas

Os muestro ahora unas creaciones de lana. Cuando me cansé del crochet quise recordar cómo se hacía punto. Aprendí cuando era adolescente. Siempre veía a mi abuela haciendo las bufandas para todos los nietos. Cada uno de nosotros tuvimos esa bufanda, todas iguales para que nadie se enfadara. Tenía hasta sus flequitos. La mía era roja y la de mi hermano celeste, otras eran rosa, amarillas…
En esa época mis tías y mi madre también hacían mucha ropa para todos nosotros también, incluso para ellas. Sobre todo eran jerséis. Mi madre era la especialista en ventanitas y ochitos. Recuerdo uno que me gustaba mucho, lila con ventanitas, la mar de calentito.
Y la Tita Pepa, era especialista. Sobre todo los hacía con motivos infantiles, como el que hizo de Tom y Jerry (o ese lo hizo la Tita Conchi, ya no me acuerdo porque las dos tejían mucho). A mí me hizo uno con la cabeza de un caballo, era precioso. Así largo casi hasta la rodilla…en esa época se llevaban las mayas (vamos lo leguis actuales) con los chalecos largos.
Ahora ella sigue haciendo cositas pero ya para su propio disfrute. A ver si se deja caer alguna vez con algún chalequito de esos que hace de hilo (yo lo quiero en rojo, ehn?, como el de ochitos que te hiciste, fale?, jejeje).
Bueno y de ahí me vino las ganas de recuperar este palo. Y es que la abuela y todas mis tías hacían punto casi durante todo el año. Esas tardes de domingo en casa de la abuela, todas tejiendo….
Empecé como siempre por lo fácil: patuquitos y me salieron estas botitas que se parecen a las de los dibujitos de Marco, verdad? Aunque Marco debió tener un pie más grande que otro, no?

Después hice una mantita, para el carrito, quizás? No sé, porque es demasiado pequeña…

También hice un conjunto de zapatitos de niña con sus manoplas a juego, pero no puedo enseñarlo porque las regalé antes de hacerle fotos.
Pero me pasé a algo más práctico y empecé a hacer un bolsito. Y digo bien, porque sólo hice eso, empezarlo. Por supuesto no lo terminé, tuve que echar mano de mi madre para que lo terminara y mirad que bien ha quedado…

Gracias Mamá!!!

Lo que pasa es que son demasiadas vueltas y me aburro. Anda que yo también, me estoy dando una fama…jajaja
Pero volví a las cosas pequeñitas: empecé un conjunto de patucos y chalequito, para Álvaro. Pero ya creo que no le quedará bien, ya tiene casi siete meses y no creo que le valga, no creéis???

Ya creo que será para su futuro hermanit@.

Y aquí terminó mi fiebre por la lana. Me hice de un gran arsenal de lanas, de casi todos los números de agujas e incluso de mi cesta de mimbre para guardarlo todo. Y eso, está todo guardado, jijiji, hasta la próxima que me dé por esto. Lo mismo ahora cuando venga el frío…

Hasta la próxima…